¿Por qué tengo siempre los pies fríos? En Mujeralia te damos las claves para que disipes todas tus dudas sobre esta cuestión. Pero para empezar a hablar del tema, te diremos que una correcta alimentación y una hidratación adecuada son fundamentales.
Seguro que muchas veces te has preguntado por qué siempre tienes los pies fríos sin encontrar una respuesta lógica. Pues bien, te devolvemos otra pregunta: ¿cuánto te preocupas de tus pies? Con esto no queremos decir si llevas las uñas pintadas y cortas, sino si te has parado a pensar que la salud tiene gran parte que ver en este curioso asunto.
Con las temperaturas frías del invierno, puede ser normal (si no llevas un calzado adecuado) tener las extremidades inferiores “congeladas”. Pero si este problema traspasa las fronteras de las estaciones, y en verano te sigue ocurriendo, quizá debas prestar especial atención.
Hay varios problemas que pueden provocar que nuestros pies estén siempre fríos, te los enumeramos uno a uno.
Problemas de circulación
Suele ser lo más frecuente entre quienes tienen los pies fríos en cualquier época del año, lleven calcetines o zapato cerrado. Cuando la sangre no fluye con normalidad, es normal que las extremidades estén frías. Si dudas al respecto, lo mejor es consultar con un profesional sanitario y escuchar su diagnóstico.
Sudor excesivo
Aunque parezca mentira, es otro de los grandes causantes de los pies fríos. Pero, ¿por qué se suda en exceso? Uno de los principales motivos es llevar un calzado que no transpire bien. Aunque también tienen que ver otros motivos como estrés o ansiedad generalizada. Al aumentar la temperatura a causa de los nervios, se produce el proceso de hiperhidrosis, que es la respuesta de nuestro organismo para refrigerar el cuerpo.
Otras causas
Además de estas dos, encontramos otras causas, como por ejemplo, problemas neurológicos, enfermedad hepática o renal o problemas con el tiroides (hipotiroidismo o hipertiroidismo, entre otros). Los problemas coronarios o la esclerosis múltiple pueden influir del mismo modo.
Remedios naturales para evitar los pies fríos
- Para empezar, necesitas llevar una dieta equilibrada y correcta. Durante el invierno, evita las verduras frescas o sin cocinar y tómalas hervidas o salteadas. Cambia los lácteos por café e infusiones calientes y opta por especias que suben la temperatura corporal como la cayena o el curry. Los alimentos con magnesio, vitaminas C, E y K y calcio serán tus mejores aliados. Y entre horas, no te pierdas los frutos secos, como las castañas en otoño. No se nos olvida, como no, el deber de beber agua.
- Haz ejercicio de manera regular. Sobre todo si trabajas sentada frente al ordenador varias horas en la misma postura. Puedes comenzar con el running poco a poco, aunque si lo prefieres, es suficiente con andar todos los días una hora a paso ligero.
- Mantén los pies secos. Utiliza calcetines y calzado de calidad, que facilite la transpiración de los pies. Cambia los calcetines a menudo si notas que se te mojan.
- Prueba los masajes en los pies, bien con hidroterapia o bien con las manos. Está comprobado que mejoran la circulación de la sangre en esta zona y, por tanto, serán muy beneficiosos.
¿Te hemos conseguido aclarar por qué siempre puedes tener los pies fríos? Si ves que con los remedios naturales no se te pasa, consulta a tu médico.
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