¡No lo des por perdido! ¿Te has preguntado alguna vez cómo blanquear la ropa? Si crees que esa camisa, ese mantel o esa camiseta están echados a perder, ¡estás equivocada! Antes de tirar esas prendas, prueba estos remedios caseros que te vamos a dar a continuación. Seguro que recuperas esa camiseta que tanto te gusta.
Muchas veces puedes dar por perdida una prenda por tener una mancha difícil de quitar, porque esté rota, pasada de moda. Pero no porque esté amarillenta. Cuando hablamos de prendas blancas, esto suele pasar. Antes de deshacerte de ellas, apunta estos trucos para saber cómo blanquear la ropa.
Trucos para blanquear la ropa
- Sol: si tender bien la ropa nos ayuda a ahorrar tiempo a la hora de lavar y planchar, tender la ropa en el exterior, que le dé el sol, también ayuda a blanquear la ropa. Además de proporcionar un olor fresco. Aunque eso sí, esto no siempre es posible si vives en un piso y no puedes colgar la ropa fuera.
- Limones: colocas la prenda blanca en un recipiente con agua, jabón neutro, un puñado de sal y el zumo de dos limones. Déjalo reposar para después lavarlo de manera normal, verás cómo la ropa se va blanqueando.
- Agua oxigenada y amoniaco: pon en remojo durante cinco minutos la prenda que quieras blanquear, con agua corriente, mezclada con agua oxigenada y unas gotas tan sólo de amoniaco. Después, solo tendrás que volver a lavarla de manera normal, y verás como notas los resultados.
- Detergente natural y agua oxigenada: este truco es especialmente útil para las prendas de lana, colocando al ropa en agua fría, con detergente natural y unas tres cucharadas de agua oxigenada, para después lavar.
- Vinagre: las camisas blancas sufren mucho. Desde manchas de vino, hasta cercos amarillentos sobre todo en las axilas. Así que si quieres hacerles frente, lo mejor es que añadas un chorro de vinagre al agua con el que lavas la prenda. Déjalo reposar una media hora antes de enjuagarlo para lavarlo de nuevo.
- Leche: este remedio para blanquear ropa está especialmente indicado para aquellas sábanas, manteles o toallas que tenemos guardadas durante mucho tiempo y están amarillentas. Para ello, jamás uses lejía, porque lo único que conseguirás es que las manchas sean más amarillentas. Es mucho mejor dejarlas en reposo en un barreño con leche cruda.
Para evitar que en el futuro surjan estas manchas amarillentas, es mejor que no guardes la ropa blanca en plástico, sino en fundas de tela. Esperamos haberte ayudado a saber cómo blanquear la ropa con estos remedios caseros.
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