Bebidas en la comida: Las más adecuadas según la comida. Muchas veces, a la hora de preparar una comida o una cena, nos encontramos con un gran problema y es no saber qué bebida elegir para acompañar los platos, sobre todo cuando tenemos varios invitados y distintos tipos de comida.
Las Navidades son las fechas propicias para este tipo de problemas, a los que vamos a intentar dar solución, con una serie de consejos sobre qué bebidas son las más adecuadas dependiendo del tipo de comida que hayamos elegido.
La Navidad es el momento del año donde reunimos en torno a una mesa para cenar o comer, y si es importante cómo decorar una mesa navideña de una manera elegante, mucho más lo es elegir un menú adecuado, del que no tenemos que olvidarnos de las bebidas.
Porque no vale de nada tener una mesa perfecta, con unos centros navideños ideales, si a la hora de la verdad, nuestros invitados piensan que no hemos sabido elegir bien el menú.
No sólo en estas fechas, sino que cada vez que organizamos una comida o cena, tenemos que pararnos a pensar qué tipo de bebida va mejor con cada alimento, y aunque hay unas normas básicas, te vamos a dar unos consejos para elegir correctamente la bebida adecuada para cada comida.
- Sopas, pastas y legumbres: en estos casos, la mejor elección es decantarte por un vino blanco seco, aunque por ejemplo el arroz podría admitir un vino tinto si fuera acompañado de carne, o las pastas y legumbres, también podrían ir acompañadas de un vino rosado joven.
- Pescados: en esta categoría convendría diferenciar por tipo de pescado, por ejemplo, los blancos admiten servir vinos blancos ligeros o rosados jóvenes, mientras que para el pescado azul y los mariscos, lo ideal es el blanco con más cuerpo o incluso en cava en el último caso o un vino blanco de aguja. El rosado joven o el tinto se podría servir en el caso de que los pescados fueran acompañados de guarnición.
- Carnes: también hay que diferenciar el tipo de carne que vamos a servir, porque una carne suave o blanca puede ir acompañada de un rosado o tinto joven, pero las carnes rojas o de caza, sientan mejor con un tinto añejo.
- Huevos: los vinos tintos jóvenes son la compañía perfecta de los huevos al plato o con comidas fuertes, mientras que si son cocidos o revueltos, se acompañan mejor con rosados o tintos secos.
- Postres: lo más común es acompañar a estos postres con cava o champagne, pero si fuera el caso de un postre frío o salado, puedes servir un vino blanco frío y seco o semiseco, y en el caso de ser dulce, se puede utilizar un vino generoso, ¡ideal para los polvorones!
Siguiendo estos consejos, seguro que aciertas con la bebida a elegir en cada comida, ya sea en Navidad o en cualquier otra fecha.
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