Aire acondicionado: Pros y contras más comunes para la salud. Llega el verano y mucha gente no está dispuesta a pasar calor durante los meses estivales. Ante esto, ¿cuál es la solución? Un buen aparato de aire acondicionado pero, ¡ojo! no es oro todo lo que reluce…
El aire acondicionado consigue mantener una determinada temperatura en un lugar cerrado, así como una determinada humedad, al tiempo que recicla el aire que respiramos. Eso sí, como cualquier aparato, ya sea aire acondicionado portátil o no, requiere un mantenimiento adecuado.
Si bien es cierto que ha conseguido mejorar la calidad del trabajo que realizamos al estar más fresquitos, o incluso la calidad del sueño, es muy importante no programarlo a temperaturas bajas, ya que entonces, las desventajas serían mayores que las ventajas.
A continuación te enumeramos los pros y contras de contar con un aparato de aire acondicionado y el buen o mal uso que le demos:
Pros del Aire Acondicionado
- Las altas temperaturas hacen que nuestro organismo se desregule y podamos padecer episodios de insomnio, dolor de cabeza, sensación de fatiga e incluso cansancio mental. Con el aire acondicionado a una buena temperatura eliminaremos todos estos síntomas.
- Mejora nuestra actividad laboral y hace que rindamos más en nuestro puesto de trabajo. Eso sí, cuando la temperatura es baja, también hace que nos sintamos incómodos.
- Evita la sudoración y, por tanto, mantiene nuestra hidratación. Esto no quiere decir que dejemos de beber líquidos, ya que la ingesta en verano es muy importante.
- Disminuye la concentración de insectos debido a una temperatura más moderada.
Contras del Aire Acondicionado
El calor y el hecho de sudar, hace que pensemos que lo ideal para quitarnos de encima esa sensación, sea poner el aire acondicionado cuanto más bajo mejor. De esta forma enfriaremos antes la estancia y eliminaremos el calor de nuestro cuerpo. ERROR. ¿Qué nos ocasiona?
- Alteración de las mucosas y el sistema respiratorio, siendo frecuentes los resfriados, las placas y la congestión nasal. Normalmente son debidos a cambios bruscos de temperatura, por ejemplo, de pasar del calor extremo de la calle, al frío de una estancia.
- Sequedad en las mucosas y en los ojos, provocando rinitis crónica, faringitis, conjuntivitis, afonía, así como posibles alergias del sistema respiratorio a hongos y polvo.
- Problemas musculares o tortícolis si el chorro del aire nos da directamente.
- Más ruido en la estancia donde está situado
- Posible transmisión de enfermedades infecciosas del aparato respiratorio
Pautas a seguir con el Aire Acondicionado
- Redirige el cañón de aire a un lugar, de manera que no incida directamente sobre las personas.
- Ventila las habitaciones de manera periódica para reciclar el aire.
- Sigue a pies juntillas las revisiones y mantenimiento necesario del aparato.
- Mantén una temperatura siempre entre 21º y 25º, más fría en invierno, y más cálida en verano. De este modo evitaremos los cambios bruscos de temperatura que tanto nos perjudican.
- Consigue siempre en la estancia una humedad entre el 60% y el 70%.
El aire acondicionado, como ves, tiene sus pros y sus contras. El resultado de tener uno es casa o en el trabajo puede ser inmejorable, siempre y cuando lo utilicemos con cabeza.
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